Retos que enfrentan todos los emprendedores y cómo enfrentarlos

Como tatuarse, emprender es una decisión que te acompañará toda la vida, por eso no es un oficio para cualquiera. Además de la libertad de tiempo y de decisión, emprender también implica una avalancha de nuevas tareas, trabajos, decisiones difíciles y compromisos que debes estar dispuesto a resolver todos los días a cualquier hora. Entonces, el primer reto para un emprendedor ocurre antes de emprender, al evaluar si tiene la suficiente tolerancia a la frustración y el ánimo de crear sus propias reglas.

Para Mike Gardon, creador de The Break Community, esto se traduce en que “ahora eres 100% responsable de todo”. Esto también significa que vas a tener mucha más libertad, pero esto puede ser un arma de doble filo, sugiere Gardon.

“Puede ser difícil porque no hay reglas necesariamente. Tienes que hacer las reglas y apegarte a ellas”. Y si bien esto brinda flexibilidad, también puede ser una espada de doble filo, pues “con mayor libertad algunas veces llega mayor responsabilidad”, añade.

Por todo esto y para vencer un poco el miedo que puede dar lanzarse al agua, preparamos una lista con algunos de los retos más comunes que encuentran los emprendedores y algunos consejos de expertos en liderazgo y de otros empresarios que, seguramente, también pasaron por esto.

Algunos retos que enfrentarán los emprendedores jóvenes (o primerizos)

Ingresos irregulares. Bienvenida la libertad, pero eso también implica que tus ingresos ya no serán un salario fijo cada mes. “Cuando vendes productos, existen temporadas buenas y malas. Incluso habiendo tenido este emprendimiento durante tanto tiempo que ya sabes lo que te espera, nunca nos hemos acostumbrado completamente”, explica Katie Lauffenburger, quien fundó Wonder City Studio con su esposo Phil Thompson.

Para Thompson, la primera “sequía” temporal puede ser muy deprimente. “Es fácil solo revolcarse y pensar: “bueno, supongo que nunca venderé”, mientras cuestionas al universo”.

Sin embargo, después de un tiempo entiendes que no es el universo quien tiene el control sino tú, y tú puedes idear un nuevo producto, hacer más mercadeo o inventar un newsletter. “Soy el conductor y puedo decidir, simplemente, hacer más”, sostiene.

Sobreponerse a la inexperiencia y al escepticismo. “Cuando empecé mi agencia, enfrenté el reto de convencer a clientes mayores y más experimentados en un mercado competitivo”, cuenta Cem Hasoglu, miembro del consejo de Forbes y fundador de Puzzle Agency. “Pero superé el escepticismo al combinar el profesionalismo, mi conocimiento especializado y resultados exitosos de mis primeros clientes para construir una reputación sólida”.

Dominar habilidades de presentación. Cuando tienes poca experiencia en ventas, puede ser difícil ganar nuevos clientes, por eso Hasoglu recomienda pulir tus habilidades comunicativas y de presentación. “Puedes afilar tus habilidades para dirigir a los clientes a planes beneficiosos para ellos. Sobre todo con los clientes indecisos, ofrecer un consejo honesto y genuino sobre lo más beneficioso para ellos, puede ser lo más efectivo”.

Además, de acuerdo con el consultor y miembro de ActionCOACH España, Jose Luis Gonzalez Rodriguez, existen tres grandes retos que los emprendedores deberán enfrentar en algún punto.

Falta de planeación estratégica a largo plazo.

Sorprendentemente, de acuerdo con González, la mayoría de empresas no operan bajo un plan estratégico definido, organizado y consistente. Esto no sólo deja a las organizaciones sujetas a las desconocidas ideas que surjan en la mente del emprendedor.

Además, “los equipos se desmotivan y pierden compromiso cuando no son conscientes de la estrategia de la empresa, lo que puede impactar negativamente la productividad y eficiencia”, sostiene. ¿Qué pueden intentar los jóvenes emprendedores?

Un primer paso es hacer un análisis FODA (fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas) y acercarse al Modelo Canvas creado por Alexander Osterwalder, que ayuda a ordenar ideas y proyectar cómo ofrecer valor a los potenciales clientes.
Estos dos ejercicios pueden ayudarte con un segundo paso: definir una visión y misión claras.
Establece objetivos con el modelo SMART: estas son las siglas en inglés para tener objetivos: específicos, medibles, logrables, relevantes y en una duración limitada. Esta ruta te permite evaluar y ajustar la estrategia de ser necesario.
De hecho, González recomienda re-evaluar periódicamente las estrategias. “El ambiente de los negocios está evolucionando constantemente. Por esto, no tengas miedo de ajustar las estrategias si los resultados no se alinean con los objetivos. La adaptabilidad es la clave para el éxito a largo plazo”.
Incorpora un organigrama invertido. En este caso, el jefe de la empresa es el mercado y es quien da instrucciones. El trabajo del equipo de ventas será, entonces, enlazar las nuevas tendencias y la necesidad de adaptarse a los cambios que observan. Esto es clave para una última recomendación…
Segmenta a los usuarios. “Identificar y categorizar a los clientes en grupos, basados en sus necesitados, permite una estrategia y atención más personalizada”.

Mal manejo del tiempo, un recurso escaso.

Desde un exceso de reuniones laborales que consumen todo el día, hasta notificaciones constantes que no nos dejan concentrar, el manejo del tiempo es uno de los equilibrios más difíciles de lograr para quien está emprendiendo.

De acuerdo con Gonzalez, quien ha trabajado en manejo del tiempo con cientos de emprendedores, gerentes y empleados, “más del 90% de las personas desperdician entre 15 y 40% de su día como resultado de las tecnologías creadas en la revolución digital”. Para reducir este porcentaje, recomienda:

Prioriza tareas con herramientas como la Matriz de Eisenhower, que básicamente ayuda a las organizaciones y personas a priorizar entre lo importante y lo urgente.
Organizar el tiempo de los emprendedores puede ser difícil, sobre todo, porque tratan de hacerlo todo ellos mismos. Por eso, “aprender a delegar responsabilidades a miembros del equipo en quien confías es esencial. Esto no sólo libera tiempo, sino que empodera a los empleados y fomenta su crecimiento profesional”, sostiene González.
Establece tiempos concretos para tareas y reuniones. Sobre todo, procura que los deadlines y plazos de dichos eventos se respeten. Además, evita las interrupciones de otros colegas y utiliza herramientas y aplicaciones (como Asana, Todoist, Trello o Evernote) para controlar el tiempo que pasas revisando el correo, en aplicaciones de chats o en redes sociales.

Falta de control financiero, iliquidez y efectivo.

Las decisiones tomadas siguiendo la intuición son arriesgadas. Aún así, González reconoce que muchos emprendedores toman decisiones intuitivas debido a una falta de información o de entendimiento de los datos financieros.

Por eso, los emprendedores suelen enfrentarse constantemente a la iliquidez o el manejo descuidado del dinero en efectivo. ¿Qué pueden hacer las personas para evitar esto?

Implementa un buen sistema de planeación de recursos. “Usar un software confiable de contabilidad para registrar todas las transacciones es esencial. Esto permite tomar decisiones basadas en información”.

Establece KPIs e indicadores de desempeño. Lo primero que debes hacer es identificar cuáles son los indicadores de desempeño relevantes para tu negocio. Para Gonzalez, esto debería estar incluido en un tablero que le permita a todo el equipo ver esta información.